Hoy estamos soñando ligeros, como plumas que se elevan y descienden y se vuelven a elevar. Entre el oro que tus ojos dejan en el camino, paso como ladrón furtivo. Temeroso, sin tomar parte para mí.
Miras a través de mí, soy invisible. Mientras intento cruzar la línea que separa dos mundos y establecerme fuera de tu punto ciego, y tomar tu mano una vez más y para siempre.
Pero adiós días: desaparecen. El sueño(desaparece), tú(desapareces), yo.
Todo desaparece y reaparece intermitentemente entre luces de la misma naturaleza. Afuera todo sigue su ritmo, nosotros somos independientes, atados por la cuerda roja que significa al mismo tiempo amor y rebeldía.
Nuestra escena cargada pasiones guardadas y secretos a voces nos augura un futuro cercano agradable. Estamos tú y yo. Somos un par de haces que se han desviado de su fuente y ahora brillan por sí mismos. Soñamos.
Hoy estamos soñando ligeros. Te desprendes de mi mano y te elevas sola, yo me asiento y miro la realidad y grafico nuestra historia. Hoy soñamos ligeros, como energía dispersa, como vientos rebeldes. Me vuelvo a ti, a tu rostro, a tus manos, a ti. Dejo a un lado mi presencia para ser parte de la tuya, pero entonces la luz se enciende, a lo lejos, por sobre las montañas.
Hoy soñábamos ligeros, hoy despertamos pesados.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario